Octubre
Octubre y el otoño. Período de transición que busca el equilibrio y la tranquilidad. Personalmente, encuentro este equilibrio en actividades como el yin yoga. Una de las posturas que más me gusta utilizar en estas clases es la postura del árbol o para los que etáis familiarizados ya en este mundillo también se la conoce como Vrksasana que significa: vrksa, árbol y, asana, postura.
Esta postura, tal y como el nombre sugiere representa un árbol. La pierna estirada representa el tronco, y el pie las raízes ancladas al suelo. Por otro lado, tenemos los brazos que simbolizan las ramas, aquellas que crecen hacia el cielo.
Entre muchos de sus beneficios encontramos en esta postura quietud mental y física, por tanto:
- ayuda al equilibrio y a la concentración debido a los segundos en los que la mantenemos y la respiración, también.
- ayuda a las personas con los pies planos.
- tonifica y mantiene fuerte los gemelos, los tobillos y los muslos.
- estira bien la ingle y la columna vertebral al hacer el estiramiento.
- calma y ordena la mente a la vez que mejora el enfoque.
Esta postura de yoga trabaja la parte inferior del tronco, así como los pies, los gemelos, los muslos y los glúteos debido a que se deben mantener activos durante la práctica.
Si eres principiante y quieres trabajar y mejorar el equilibrio te recomiendo que comiences con su práctica para ir avanzando con las otras posturas de equilibrio.
Recuerda, es importante mirar a un punto fijo y mirar siempre hacia delante.